Hay muchos artistas que han utilizado las matemáticas como base fundamental de sus obras. Destacan pintores como Joan Miró, Wassily Kandisky o Piet Mondrian en cuyas obras predominan elementos geométricos.
Desde hace muchos siglos las personas utilizaban las formas geométricas aplicándolas en las construcciones, por ejemplo la Alhambra de Granada, decorada con mosaicos con motivos geométricos basados en triángulos, cuadrados y otros polígonos.
La geometría se hace arte: la Alhambra, la más bella joya geométrica y arquitectónica
La Alhambra, tanto en el plano constructivo como ornamental, esconde una belleza matemática, que está relacionada con la aplicación de una estética basada en el uso de proporciones tanto pitagóricas como áureas. En la Alhambra, espacio representativo del poder otorgado por Allah, las matemáticas se expresan a través de la geometría, el color y la luz. La geometría fue empleada por los geómatras y tracistas del Islam medieval como lenguaje gráfico, caracterizado por la utilización de un solo diseño, que será la unidad de cualquier composición ornamental que, por multiplicación de sí mismo, cubre una superficie indefinidamente, creando formas insólitas que representan la unicidad, Allah es uno, entre la multiplicidad, y está en todas partes. Al modelo reproducido aplicaron el color que, ayudando al desarrollo de la forma, es una manifestación de la luz, símbolo de divinidad en el Islam. Desde el punto de vista de las matemáticas la Alhambra es única en el mundo, por ser el único monumento construido antes del descubrimiento de la teoría de grupos, ya que cuenta al menos con un ejemplo de cada uno de los 17 grupos cristalográficos planos en los diferentes alicatados que decoran sus paredes.
